Respirar es más fácil
Purificas el aíre
que respiran mis pulmones
en cada hálito de vida.
Trasteas con mis dedos
mientras mis pensamientos
vagan erráticos
entre fumarolas de pasado.
La tibieza del mundo
excreta palabras de olvido
sobre las marcas de tiza
que sobreviven en los árboles.
El trazado de los brazos
sobre el cielo inmaculado,
la huella de una ausencia interminable,
el momento de la pausa
de la quietud en la tempestad.
Aprendimos a caminar
sin el corsé de lo consabido,
sin la rigidez de las normas absurdas.
La única frontera éramos nosotros,
el único recorrido nuestro cuerpo,
la verdadera meta encontrarnos.
Pablo Malmierca
Tengo que daros una gran noticia, próximamente, en concreto el 7 de noviembre, será la primera presentación de mi nuevo poemario “No comas mi corazón” publicado con mi editorial de referencia, Piediciones.
En esta ocasión el libro aparecerá prólogado por el poeta y experto en la poesía de Claudio Rodríguez, Luis Ramos, que ha realizado un espléndido trabajo dando las claves de una obra que se abre en múltiples facetas.
Además hay que destacar que cuento con la extraordinaria colaboración de Fernando García Malmierca, fotógrafo zamorano que ha colaborado con siete fotografías interiores, que preludian cada una de las parte en que se ha dividido el libro y con la foto de portada. Fernando es un artista reconocido a nivel internacional y contar con su trabajo es un lujo que nunca podré agradecerle lo bastante.
“No comas mi corazón” supone un paso adelante en mi poesía. Si dD era un libro introspectivo marcado por el yo y el él, este nuevo trabajo es una introspección en el nosotros desde un punto de vista ético. Y qué mejor que un sentimiento universal como el amor con sus múltiples facetas para recorrer esa ética del ser humano.
Conforme se acerque su publicación iré desgranando más aspectos del libro.
La espuma del crimen
La espuma de tus dunas
teje el corsé
que te atenaza.
Hay humedades
que anuncian
primaveras.
Hay sequías
que anuncian
ocasos.
La juventud atenaza
tus pasos expertos.
Serás el acto fallido
de una revolución.
Serás el prólogo
de un fracaso.
Epílogo de un final
que, nunca, fue el tuyo.
El dios de tu destino
perdió su misericordia
acariciado por el pecado.
Su frustración: tu condena.
Llueven cascotes de sevicia
sobre el futuro
de tus hijos nonatos.
El granizo
arrecia sobre el tacto de tu oído.
Tu derrota
prefigura todo el odio
del universal crimen
de su mano cobarde.
Pablo Malmierca
El poema
se sujetó a las palabras
con el imperdible
que traías en tus pasos.
Pablo Malmierca
No soy muy dado a felicitar la Navidad, pero este poema es mi agradecimiento a todos vosotros por apoyarme. ¡Feliz Navidad!
COMIENZO
Siempre es difícil
comenzar una etapa.
Las losas convertidas
en azote de tus sentidos.
Se evaporan
los tímidos cascotes
que acarician tu oído.
Pensé
en dejar atrás tantas cosas…
Tus latidos,
mis querencias,
el abrigo de tus labios,
el yermo de mis días.
Nunca hubo saltos al vacío,
me quedé sentado al borde,
famélico,
perseguido por mi propia jauría.
Los ecos agudos de tu voz
clamaban ausencias;
la ronquera de mis logros
perseguía tu descanso.
Decidimos abarcar el vacío,
repoblar la singladura,
acariciar el sinsentido.
Pablo Malmierca.
Dices que el tiempo
se escurre entre mis recuerdos.
Viviremos entre la arena
pegada a mis anhelos.
Pablo Malmierca